Por: Iván Cigarroa
-Los años pasan y me sigue pareciendo increíble que Gorillaz mantenga el nivel creativo que cuando se dio a conocer. Ahora con Cracker Island confirman que Damon Albarn, Jamie Hewlett y Remi Kabaka Jr. siguen inmersos en ofrecer canciones valiosas, que logren permear en el público y logren una trasncendencia única.
Por su parte, 2D, Russell Hobbs, Noodle y Murdoc Nicals siguen con la historia que ha recorrido ya 8 discos y una gran cantidad de videos. La exploración de estos personajes y su completo desarrollo también son parte fundamental de cada entrega, en este caso Cracker Island es un homenaje al egocentrismo de cada uno de nosotros y el placer de demostrarlo en redes sociales.
De igual forma, este disco, que inició como la segunda parte de Song Machine de 2020, se convirtió en una nueva historia, la que menciono arriba; y al partir de cero en cierto modo, se vuelve una de las producciones más frescas y digeribles que la banda ha hecho desde Plastic Beach, en 2010. Lo que también explica por qué cada sencillo ha sido un verdadero éxito.
Y esa parte del egocentrismo probablemente quede implícita para Gorillaz en las colaboraciones, que las tienen en cada producción pero con un considerable aumento en sus últimos dos discos. Pero también hay cambios aquí, el más notable: la ausencia del hip hop, por lo menos en las colaboraciones, pero en general se ausentó bastante para dar paso a otros géneros. Esto no quiere decir que el grupo haya cambiado su sonido, quiere decir que los colaboradores se ajustaron al de Damon Albarn y compañía y el resultado rebasa las expectativas.
Piezas como Skinny Ape, The Tired Influence o Tarántula son interpretados por ellos mismos con gran elocuencia y claridad, es lo menos que se espera. Pero ver incluidos a Bad Bunny en Tormenta, Stevie Nicks en Oil, Tame Impala y Bootie Brown en New Gold, Adeleye Omotayo en Silent Running, a Beck en Possession Island y Thundercat en Cracker Island es simplemente explosivo. Sin excepción, todos supieron sonar de acuerdo al concepto y a la altura de Gorillaz.
Sin duda este disco será recordado por un rato, además de la polémica por la inclusión de Bad Bunny, por mostrarse con nuevos bríos ante público nuevo y seguidores de antaño. Ahora Gorillaz se encamina a expandir su música en nuevas plataformas, mantener su concepto en conciertos y aumentar la expectativa en las diversas fases en que la historia de los personajes se encuentra, que al momento de publicarse este álbum, están en la 7. Discazo.
Gorillaz - Cracker Island
Parlophone / 2023
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