Por: Iván Cigarroa
-Para tener un mejor contexto de Soulfly, baste decir que quien fuera la voz de Sepultura decidió probar nuevos horizontes, actualizar el sonido a la época y demanda, y separarse por completo de quienes impedían su crecimiento musical. Eso fue hace 25 años, y con Totem, su doceava producción, parece intentar mantener un equilibrio entre estos dos de sus tantos proyectos.
Y es que aunque en sus inicios Max Cavalera decidió navegar por el mar del nu metal, la realidad es que actualmente dista mucho de sonar a temas como Back To The Primitive o Bleed. Y aunque hace 10 años seguramente sonaba más a Sepultura, en un ejercicio de sinceridad es justo decir que así es como suena ahora, como si nunca se hubieran desmembrado.
Para cuando esta reseña fue escrita, tenía escasas dos semanas que Max y su hermano Igor se presentaron en México con la gira Back To Roots, donde tocaron completo el álbum Roots, el último con la alineación original de Sepultura. Y por la forma en que sonaban en aquella ocasión, no se siente a Soulfly tan alejado ahora. Y es normal, es la banda de Max, pero parece que se tomó literalmente lo de regresar a las raíce, y en vez de encaminarse al nu metal retoma el thrash y lo une al groove metal que desde hace 15 años caracteriza a la banda brasileña.
Por eso Totem debe ser considerado un parteaguas -pero no necesariamente el mejor disco-, porque apunta hacia un nuevo sonido (para Soulfly), es decir, el que imperaba en el temprano Sepultura. Y suena bastante bien, porque prevalecen los riffs ponchados, las baterías rápidas y la voz salvaje y gutural de Max, con una profunda y actual crítica social y política y un sonido nostálgico pero furioso. Es como debieron seguir siendo después de Roots, sin haberse separado y recorrido juntos un camino largo para llegar hasta hoy con este disco.
Hay pasajes potentes, muy bien hechos, en Totem, Ecstasy Of Gold y Rot In Pain; pero también hay piezas llenas de voces guturales y letras contundentes en Scouring The Vile, Ancestors y Superstition. Y quizá la que mantiene todos los pasajes, niveles e influencias por los que Soulfly ha atravesado es Spirit Animal, de más de 9 minutos de duración para tener la capacidad de aglutinar todo en un solo tema.
En este punto, Max Cavalera parece llevar a esta banda al punto al cual Sepultura nunca llegó. Y si bien quizá nunca llene la primera los zapatos de la segunda, el legado del músico brasileño es innegable y no importa con cuál las dos bandas trascienda o tenga mayor alcance, hoy por hoy forman parte de la historia de la música y con un gran legado. Soulfly ha sobrevivido a las tendencias, puede hacer lo que quiera mientras lo siga haciendo bien.
Soulfly - Totem
Nuclear Blast / 2022
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