Por: Jakmer
En los últimos años algunas bandas y
solistas, tomaron la iniciativa de lanzar sencillos, en los que experimentan
con un sonido diferente o nos reglan un anticipo de lo que será la siguiente
producción, posteriormente sale la producción completa, que intenta amarrar o
ampliar la idea original, por lo general, Opvs Contra Natvram, no
rompe con ese esquema.
Tenemos que mencionar que, a lo largo de
este nuevo material, cómo todo grupo tiene un sello característico en el sonido
que tiene un gran gancho: el vínculo comparativo con dos sus trabajos
anteriores: The Satanist y I Loved You At Your Darkest,
en el que cierran y actúan justo, fuera de un campo de batalla.
Así dando la visión a un último testamento
para la oscuridad. No porque sea malo que tengan esos ganchos. Es como si los
grupos metieran ecos de entregas anteriores dentro de lo nuevo. Como si
Behemoth, se sintiera obligado a dar la referencia, de qué los llevó a este
punto, en primer lugar. Como resultado, un lanzamiento que tiene finos hilos,
con dos de sus trabajos anteriores. No podemos subestimar, lo mucho que la
banda se sumergió en el libro de la oscuridad para este álbum.
Opvs Contra Natvram, contiene
diez canciones, pero en realidad tienes nueve temas, con un intro/ambientación
de tres minutos que apertura.
Post-God Nirvana, en la que el líder Nergal, asume una vez más la postura de un orador loco, a punto de soltar gritos sobre un mundo de oscuridad. Todo bien acompañado con un montón de tambores estruendosos, llamando a la batalla.
Con paisajes sonoros y desvaríos de locura: Malaria Vvlgata, la desobedecía, canto a todo lo que tienes que hacer, ya que Behemoth no desaprovecha la oportunidad para recordar a la gente que son una banda heavy. Con una lírica al rechazo a toda doctrina.
The Deathless Sun,
es el tema en el que la banda encuentra su ritmo particular, es el tipo de
canción con la que se puede disfrutar el sabor de las marcas modernas de
Behemoth. A lo largo de los años y sus trabajos, la banda ha aumentado y pulido
su sonido, sumando coros más tranquilos, que hacen gran parte del trabajo
melódico.
Para que la banda puede centrarse en la
brutalidad y al mismo tiempo un sonido de cuernos sinfónicos, que armonizan,
cada vez que ellos quieren enviar al oyente a la batalla. Los momentos pesados
a lo largo de todo el disco, son a menudo, en el sonido que manejan.
Ov My Herculean Exile seguimos con un sonido lento, es una evolución natural, ya que más que nunca, al igual que el material que le precede, I Loved You At Your Darkest. Behemoth, también se esfuerza una vez más, por mantener las cosas variadas y en esta ocasión, han perfeccionado y refinado su sonido, sin dejar de lado los riffs y bombos punk, que destacan.
Entonces es hora que pasemos a una de las
canciones, donde empezamos con los himnos: Neo-Spartacvs, es la ira el
repudio, es el llamado a la batalla, profesar que el guerrero es un verdadero
pagano, en otras partes, la banda trata de mantener esos matices pesados, que
han sido de algún modo, parte de su sello. Con una tormenta de batería de
apertura, al igual que los sonidos melódicos del riff de guitarra y bajo, son
la clave perfecta para un sonido lleno de destrucción en su totalidad.
El estruendo y destreza, llega una buena
rabieta, el repudio a lo sagrado, como no sentir ese odio, por una doctrina,
entre la violenta betería y los constates riffs se hace presente: Disinheritance,
el canto a la traición, de un dios que nos abandonó.
Te has preguntado: ¿que eres?, ¿a dónde
vas?, ¿de quién eres?; es el momento de las preguntas, en este track lo hace Off
To War!, Behemoth lanza el aclamado grito de guerra, quizá para una
nueva guerra santa, que mejor orquestado por música, claro todo es mejor, si de
fondo hay algo que nos amenice la vida, esta es la mejor manera, de cuestionar.
Una poco de calma, en medio de una guerra,
es la llegada, la partida o el castigo Once Upon A Pale Horse, habla de
todo un camino lleno de prejuicios, con sonido lento y claro de la vieja
escuela del black, donde brilla la rapidez, con un tempo lento. ¿Qué más puedes
decir a un mensajero? a ese que te a abandonado a tu suerte.
Como todo buen álbum, se llega al clímax,
con canciones concretas, que incluso parecen intentos de canciones de álbumes
anteriores. Pero si no es eso, entonces la banda está más que contenta, con
armar una atmósfera musical, con el cierre de los últimos dos track: Thy
Becoming Eternal y Versvs Christvs, es un sello que ya
vienen trabajando con álbumes anteriores como el de The Satanist, ¡O Father ¡O
Satan, O Sun! que es claro ejemplo, para los que son fieles
seguidores de la banda.
Así es como concluimos esto, donde se ha establecido un cierre en el álbum con el clímax, con el sonido más pesado, más intenso, e incluso más familiar. Tiene sentido que estas dos tracks se entrelazan con todo lo que tienen: Versvs Christvs, tiene la sensación de dar un acto o capitulo para algo cinematográfico, con sus pausas para entregar un ambiente sombrío y desolador, un coro cantando la melodía, con ese trabajo de riffs, la entrada de ese piano que le da la firmeza a la melodía, con la furia de la batería, es como mover la tierra hacia al frente.
Excelente trabajo 👌🏻
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