Nadie dimensionó el alcance que Foo Fighters tendría en estos tiempos, y pensar que todo comenzó aquí...
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Foo Fighters - Foo Fighters
1995 / Capitol Records
Quien no daba nada por la banda, quién lo tomó por oportunista, quién piensa que Dave Grohl no podía hacer su propio proyecto; hoy, a 25 años de haber lanzado este disco, seguramente se comió sus palabras, evita hablar del tema e incluso no los escucha. Nunca dimensionó que Foo Fighters tendría el alcance que tiene hoy.
Y es que a un cuarto de siglo de lanzar su primer y homónimo disco, parece que el tiempo no ha pasado tanto en realidad por dos sencillas razones: mucho de lo que se escuchaba en ese entonces sigue sonando hoy día y también porque la banda sigue vigente lanzando discos, creando música y buscando siempre nuevas alternativas. Independientemente de que Grohl sea considerado un genio en la actualidad dado que no hay nuevas generaciones de músicos con su alcance (aunque gente como Gary Clark Jr. o Kevin Parker le pisan los talones).
Tras la muerte de Kurt Cobain y la disolución de Nirvana, Dave buscó reorganizar a los miembros restantes. Krist Novoselic no quiso seguir pero el segundo guitarrista, Pat Smear, dijo "jalo"; reclutó al bajista y baterista de Sunny Day Real Estate y se unieron a lo que más tarde sería Foo Fighters. Unas clases de guitarra y muchos ensayos después el líder de este nuevo proyecto ya tenía las maquetas listas y, aún así, él mismo grabó y tocó todos los instrumentos.
El disco sorprendió a propios y extraños. Mantuvo el sonido grunge que un año antes todavía tocaban sus principales exponentes, fue como un breve capítulo de nostalgia pura por todo aquello que le dejó Nirvana, aún cuando el mismo Grohl ha mencionado que buscó alejarse de todo lo que tuviera que ver con la banda, para evitar comparaciones.
Todavía me parece que This Is A Call, I'll Stick Around, Big Me o Alone + Easy Target y For All The Cows siguen sonando potente. Tuvieron el perfecto oído para decidir que tenían que ser sencillos. Pero también están ahí Floaty, Exhausted, Wattershed, X-Static o Weenie Beenie, que también tienen un poderío impresionante y que coadyuvaron a la homogeneidad del disco.
A la distancia, el álbum Foo Fighters no ha perdido su toque, permanece intacto su sonido, por muy crudo y ponchado que suene. También se queda como un documento sonoro al cuál Grohl le dio toda la importancia del mundo y logró que ese mismo mundo se interesara en él. Con este nos ganó a todos. Felicidades, son 25 y ni lo parecen.
Y es que a un cuarto de siglo de lanzar su primer y homónimo disco, parece que el tiempo no ha pasado tanto en realidad por dos sencillas razones: mucho de lo que se escuchaba en ese entonces sigue sonando hoy día y también porque la banda sigue vigente lanzando discos, creando música y buscando siempre nuevas alternativas. Independientemente de que Grohl sea considerado un genio en la actualidad dado que no hay nuevas generaciones de músicos con su alcance (aunque gente como Gary Clark Jr. o Kevin Parker le pisan los talones).
Tras la muerte de Kurt Cobain y la disolución de Nirvana, Dave buscó reorganizar a los miembros restantes. Krist Novoselic no quiso seguir pero el segundo guitarrista, Pat Smear, dijo "jalo"; reclutó al bajista y baterista de Sunny Day Real Estate y se unieron a lo que más tarde sería Foo Fighters. Unas clases de guitarra y muchos ensayos después el líder de este nuevo proyecto ya tenía las maquetas listas y, aún así, él mismo grabó y tocó todos los instrumentos.
El disco sorprendió a propios y extraños. Mantuvo el sonido grunge que un año antes todavía tocaban sus principales exponentes, fue como un breve capítulo de nostalgia pura por todo aquello que le dejó Nirvana, aún cuando el mismo Grohl ha mencionado que buscó alejarse de todo lo que tuviera que ver con la banda, para evitar comparaciones.
Todavía me parece que This Is A Call, I'll Stick Around, Big Me o Alone + Easy Target y For All The Cows siguen sonando potente. Tuvieron el perfecto oído para decidir que tenían que ser sencillos. Pero también están ahí Floaty, Exhausted, Wattershed, X-Static o Weenie Beenie, que también tienen un poderío impresionante y que coadyuvaron a la homogeneidad del disco.
A la distancia, el álbum Foo Fighters no ha perdido su toque, permanece intacto su sonido, por muy crudo y ponchado que suene. También se queda como un documento sonoro al cuál Grohl le dio toda la importancia del mundo y logró que ese mismo mundo se interesara en él. Con este nos ganó a todos. Felicidades, son 25 y ni lo parecen.
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