La experimentación y búsqueda de nuevos sonidos sigue siendo la premisa para la banda, en este disco lo vuelven a hacer.
Día 134 de #EscucharUnDiscoDiario #PorqueLaMusicaImporta #366Discos
The Strokes - The New Abnormal
2020 / Sony Music
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The Strokes - The New Abnormal
2020 / Sony Music
Se tardaron siete años en lanzar un nuevo álbum y cuatro desde su último EP. Aaahh, ¿pero qué tal las giras? Aquellas donde suben drogados y alcoholizados. Por lo menos así se le notó a Julian Casablancas en su pasada visita a México en el marco de los 10 años del Corona Capital. Así las cosas, hoy The New Abnormal llega con una mala idea sobre la banda, pero a pesar de ello éste era un álbum muy esperado.
¿Por qué? Porque es la banda más importante de la generación post nu metal y que además redefinió el sentido de la música en aquella epoca.
¿Y por qué este álbum llega con una mala idea sobre la banda? Porque con cada entrega los integrantes se soportan menos, hay más distancia que la que deberían tener en estos días y la idea de hacer una gira es claro que solo es por dinero, así que encerrarse a trabajar en equipo con la gente que peor te cae no debe ser muy agradable.
Sin embargo, The New Abnormal no quedó tan mal. Por lo menos tiene un sonido más decente que sus dos anteriores producciones, que pasaron sin pena ni gloria entre la saturada oferta musical que impera en estos tiempos.
Eso sí, no es su album más rockero: cada vez suenan más new wave y synth pop, más pulidos. Y eso que Rick Rubin los produjo en esta ocasión. Quiero pensar que sacó lo mejor que pudo de una banda que no se soporta a sí misma.
Pareciera que buscan sonar cada vez más fino y menos garage. A 19 años de su maravilloso debut, la idea de sonar como aquel entonces es más y más bizarra. A pesar de ello, The New Abnormal se caracteriza por su duración: es el disco con canciones más largas que han grabado hasta la fecha, con piezas de hasta 6 minutos.
Pero hay buenas canciones, hasta eso, lo lograron. Para ser una banda con miembros que no la llevan bien pero siguen, probablemente por costumbre, probablemente por masoquismo, hay verdaderas piezas brillantes como Bad Decisions, que fue coescrita con Billy Idol; o Ode To The Mets, Eternal Summers, The Adults Are Talking, At The Door y la maravillosa Brooklyn Bridge To Chorus.
No será su mejor disco, pero por lo menos se mantienen vigentes grabando uno. Además por muy lejos que estén del grandioso Is This It, es agradable saber que siguen experimentando en sonidos, que no busquen repetirse a sí mismos. Ya suficiente tenemos con Kings Of Leon.
¿Por qué? Porque es la banda más importante de la generación post nu metal y que además redefinió el sentido de la música en aquella epoca.
¿Y por qué este álbum llega con una mala idea sobre la banda? Porque con cada entrega los integrantes se soportan menos, hay más distancia que la que deberían tener en estos días y la idea de hacer una gira es claro que solo es por dinero, así que encerrarse a trabajar en equipo con la gente que peor te cae no debe ser muy agradable.
Sin embargo, The New Abnormal no quedó tan mal. Por lo menos tiene un sonido más decente que sus dos anteriores producciones, que pasaron sin pena ni gloria entre la saturada oferta musical que impera en estos tiempos.
Eso sí, no es su album más rockero: cada vez suenan más new wave y synth pop, más pulidos. Y eso que Rick Rubin los produjo en esta ocasión. Quiero pensar que sacó lo mejor que pudo de una banda que no se soporta a sí misma.
Pareciera que buscan sonar cada vez más fino y menos garage. A 19 años de su maravilloso debut, la idea de sonar como aquel entonces es más y más bizarra. A pesar de ello, The New Abnormal se caracteriza por su duración: es el disco con canciones más largas que han grabado hasta la fecha, con piezas de hasta 6 minutos.
Pero hay buenas canciones, hasta eso, lo lograron. Para ser una banda con miembros que no la llevan bien pero siguen, probablemente por costumbre, probablemente por masoquismo, hay verdaderas piezas brillantes como Bad Decisions, que fue coescrita con Billy Idol; o Ode To The Mets, Eternal Summers, The Adults Are Talking, At The Door y la maravillosa Brooklyn Bridge To Chorus.
No será su mejor disco, pero por lo menos se mantienen vigentes grabando uno. Además por muy lejos que estén del grandioso Is This It, es agradable saber que siguen experimentando en sonidos, que no busquen repetirse a sí mismos. Ya suficiente tenemos con Kings Of Leon.
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