Por: Iván Cigarroa
-El auge del grunge tuvo su mejor momento en 1994, justo en el año de la muerte de Kurt Cobain. Y tanto hace 25 años como hoy, el género fue piedra angular para la música que sonaría el resto de la década.
Con Dirt, su poderoso disco de 1992, Alice In Chains se posicionó como una de las bandas líderes grunge. Y con ese contexto decidieron lanzar Jar Of Flies -título inspirado en un sueño del vocalista Layne Staley-, un álbum totalmente opuesto donde impera el sonido electro acústico, mostrando una faceta distinta hasta entonces.
Desde Rotten Apple hasta Brother, Jar Of Flies es una colección de canciones más suaves, pero sin abandonar la contundencia que les caracteriza, al igual que las letras depresivas. Digamos que todo se escucha desde una perspectiva distinta.
Otras como No Excuses o I Stay Away les permitió conservar el sonido característico, pero es quizá Nutshell la que sobrepasó los límites del álbum para acomodarse en el gusto del público, aún sin ser sencillo.
A pesar del sonido descrito, Alice In Chains no abandonó su sonido ni mucho menos lo volvió más digerible; aunque es un hecho que el cuarteto tenía una fuerte necesidad por capturar este sonido.
Tal vez en otros discos hubo algunos atisbos, como Heaven Beside You o Your Decision, pero aún tras la muerte de Layne la banda ha mantenido el sonido crudo y potente que poseen desde sus inicios. Sin duda es un álbum hermoso que no podrás dejar de escuchar.
Alice In Chains - Jar Of Flies
Epic / 1994
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