Por: Guillermo Urdapilleta
-Hoy tengo el gusto de reseñar un álbum de una banda proveniente de China que, a pesar de ya tener unos añitos de vida, apenas llegó a mis oídos. Su nombre es Ou, es un cuarteto que tiene en su cantante Lynn Wu, a una líder innata cuya presencia se hace resonar apenas despide sus primeras notas.
Pues bueno, Ou llegó a mí gracias a dos cosas, al algoritmo de cierta plataforma de streaming, y a su vínculo con Devin Townsend, un músico que he seguido por años y que, aunque no lo escuche muy seguido, tiene una fuerte presencia en mi historial musical. Resulta que el músico canadiense puso su sello en este lanzamiento titulado II: Frailty, segundo álbum de estudio de la banda china, al participar activamente como cantante y músico invitado en uno de los tracks, pero también como co-productor del álbum, y bueno, si ustedes son familiares a su trabajo, podrían quizá intuir qué es lo que nos puede deparar este disco.
Se trata de un álbum muy retador, donde imperan conceptos como metal progresivo o djent con una esencia oriental bien interesante en la que emanan sonidos duros y explosivos, pero también sutiles y delicados. A través de 9 tracks y un total de 43 minutos, el cuarteto chino ha dejado en claro que su sonido puede ser muy cautivador, pero a la vez complejo. Desde el tema homónimo tema abridor, Frailty, podemos notar que la banda juega con ritmos que van mucho más allá del clásico 4/4, en los que cada instrumento toca lo suyo de forma independiente, pero tiene la capacidad de engranar a la perfección con sus compañeros. Puedo asegurar que si el álbum fuera instrumental, mucha gente lo disfrutaría, sin embargo, lo que lo hace único es el crucial papel que juega Wu con su voz y la enorme paleta de matices y sonidos que despliega.
Pronto, apenas en la segunda pieza es cuando podemos disfrutar de Purge, track que salió como sencillo y elevó las credenciales de la banda, pues es justo aquí donde Townsend colabora. Es una joyita de canción donde podemos apreciar la habilidad de cada músico, principalmente llama mi atención la batería de Anthony Vanacore, pero es innegable que Jing Zhang en la guitarra y Chris Cui en el bajo son igual de cruciales en el éxito de este track y del álbum en general, pues son capaces de inventarse infinitas figuras que a lo lejos parecen repetitivas, sin embargo, son infinitas. Nuevamente el poder de las voces nos lleva a otros terrenos, pues es como si nos hablara una humana, una máquina, o una diosa, y después un loquito explosivo que también es capaz de transmitir sonidos fantásticos, futuristas, allegados a la ciencia ficción.
Pero su abanico de sonidos va más allá, y lo podemos constatar en Ocean, donde existen claros guiños hacia el jazz, y matices que nos pueden recordar al ánime (aunque su origen es de otro país, evidentemente). El rango vocal de Wu, una vez más, es impresionante, no he visto videos de ellos en vivo, pero pienso que su presencia debe ser bárbara. Por cierto, también el uso de sintetizadores a lo largo del álbum es interesante, pues enriquece bastante la experiencia.
Me gusta el balance que tienen y cómo, a pesar de que no entiendo una palabra en chino, son capaces de transmitir muchas emociones. De hecho podría decir que es un álbum bastante visual, como por ejemplo en Redemption, imagino un escenario cuasi-celestial donde quien sea el protagonista, encuentra su paz; o por ejemplo en Capture and Elongate (Serenity), es imposible no pensar en inteligencia artificial, quizá en robots, pues los sonidos, la música y la voz, tienen un toque bien experimental, electrónico y vanguardista. Los cambios y las explosiones de este track son sobresalientes, por cierto.
Spirit Broken tiene ese espíritu del metal progresivo con las capas sonoras que acostumbramos escuchar con Devin Townsend, complementadas de forma genial por esa esencia oriental inherente a la banda. La parte instrumental es también muy interesante y visual, como lo podemos constatar con la cambiante y retadora yyds. Un aura de tranquilidad es transmitida en Reborn, mientras que el álbum finaliza de forma exquisita con la magnífica Recall cuyo juego vocal nuevamente sobresale, pero de una forma muy distinta a lo que anteriormente habían compartido, con una especie de hipnosis o trance.
Ou – II: Frailty
Inside Out Music / 2024
Comentarios
Publicar un comentario